Salobreña
Salobreña
Se encuentra sobre una roca que surge majestuosamente sobre la planicie de caña de azúcar, encumbrada por el Castillo Arabe. El casco antiguo conserva recuerdos de épocas medievales, como sus murallas y torres vigía, y de los casi ocho siglos que pasaron aquí los árabes.
El Castillo está abierto al público a diario y merece la pena visitarlo pues las vistas son magníficas.
La Iglesia de Nuestra Señora del Rosario es del siglo XVI. Está construida sobre una mezquita islámica, en estilo mudéjar y contiene esculturas de los siglos XVI y XVII.
Salobreña cuenta con numerosos puntos desde donde se aprecian bellas vistas y que merecen una visita: El Paseo de las Flores, El Mirador del Postigo, La Plaza de la Iglesia y El Tajo de Salobreña, desde donde se pueden ver las paredes verticales de roca y las rocas de abajo, donde en su día rompían las olas cuando el mar llegaba hasta la roca.
En la Oficina de Turismo ofrecen visitas guiadas históricas y de la zona de cultivo de Salobreña, de unas dos horas. Las primeras se descubren secretos, leyendas y puntos pintorescos, de la mano de un especialista, que habitualmente pasan desapercibidos. También incluyen información sobre la formación geológica.
Las segundas ofrecen al visitante la oportunidad de apreciar frutas tropicales como aguacates, mangos, bananas, papaya, caña de azúcar, etc., de informarse sobre su cultivo y recolecta, sobre la fábrica de azúcar, y de degustarlos.